El alquiler es un componente vital del sistema de vivienda en América Latina y el Caribe: uno de cada cinco hogares renta su vivienda. Esta proporción ha venido en aumento en los últimos diez años, aun cuando las políticas públicas han tenido históricamente un sesgo hacia promover la vivienda propia y nueva. En las áreas urbanas la proporción de hogares que alquila su vivienda es mayor, sobre todo en las principales ciudades, donde puede llegar hasta el 40%. Esto es de especial importancia en una región donde la población urbana llega hoy al 82% y se estima que crecerá hasta llegar al 90% en 2050.